A QUIEN LE IMPORTA



Uno siempre ha defendido que el cofrade no es un bicho raro, ni es muy diferente a los que no les gustan las cofradías. Se podía considerar el mundo de las Cofradías como una extensión de la vida misma dentro de las Casas de Hermandad, Iglesias y demás lugares donde nos manifestamos los que participamos en esta realidad. Así, si en la vida cada día nos importa menos lo que piensen los demás, ¿que nos hace pensar que en cuestiones cofrades nos interesa la opinión de quien no nos roza? ¡Ah! eso sí, me interesa cuando me va a echar flores, cuando no... que le vayan dando. "¿Qué se ha creído fulano de tal?" Sin embargo hay quienes se empeñan en dar su opinión en todo. Como si quisieran demostrar que manejan cierta habilidad o conocimiento en las distintas disciplinas del orbe cofradiero. Cuando no son todas.
En cuestiones costaleras, la opiniones de algunos son tan baratas que te las regalan de tapa tomándote una cerveza tranquilo. Ahora, no pienses que te van a dar una buena opinión de nadie, que va. Todos despellejan los pasos de los demás, y los suyos... los suyos, no veas que bien: "...dos cuadrillas.." y cuando no: "... no veas la gente que iba debajo". Eso sí, que no me toquen el Cristo de las Aguas, Los Caballos de Santa Catalina y el palio del Subterráneo. Ahí hay que morir. "Aquí estamos a años luz de aquella tierra", por la que somos capaces de organizar todo, pero no nos esforzamos en acercarnos y en entender que siempre habrá diferencias, porque el día que no haya diferencias, lo auténtico tendrá valor y la copia será simplemente eso, una copia.