Manuel Santiago Gil junto a la manigueta de la Virgen de la Paz de Sevilla
Fue el 14 de marzo de 1987. Ya había venido otras veces, pero esta fue especial. Vino invitado por Pepe Carvajal a un ensayo de la cuadrilla. Venía acompañado de un par de amigos, de los de abajo, que peinaban más que canas. Uno se llamaba Alfonso y el otro no me acuerdo bien. Pepe gozaba de un especial predicamento con él, diríamos que este hombre sentía un cariño especial por Carvajal. Tales eran las deferencias con Pepe que lo metió debajo de los Caballos cuando lo mandaba él, e incluso, por mediación del mismo Pepe, metió al Cuco en el Cristo de la Victoria del Porvenir, en tiempos en que eso era impensable.
Ese año estuvo muy en contacto, pues Pepe le encargó que buscara una banda de música para el palio, aunque al final se fastidió la cosa. Sin embargo a cambio nos trajo la A.M. Jesús Despojado de su tierra para un concierto y que nos estrenó una marcha dedicada al Cristo que saltó las lágrimas de más de uno y que aún sigue sonando por los rincones de media España. Como decía aquella noche de sábado de la Cuaresma de Granada, se presentó al ensayo y Pepe le dijo que nos igualara. Lió tal lío que algunos probamos por primera vez el Paso de Cristo. Eso sí, aquel año que Pepe echó en lo alto toda la arena que habían dragado de la playa de Carchuna, no había quien se riera debajo de las parihuelas de lo que pesaban. Pues bien esa noche, no se porqué extraña razón, fueron más livianas. Que voz más melosa que tono le daba ese hombre a lo que decía. Podría Pepe reproducir lo que le dijo al ver la cuesta de San Cecilio, digamos… que se sorprendió el hombre. Nada extraño viniendo de una tierra donde a una calle como Reyes Católicos le llaman cuesta.
Luego llamó a los pasos y yo no he oído cosas más bonitas, arengas más bien dichas y una voz más aterciopelada en mi vida para llevar un paso. Y es que habia venido el más grande de los nacidos para tocar un martillo, D. Manuel Santiago Gil. Yo apenas tenía 15 años y no lo viví de cerca, pero muchos de vosotros si. Yo si lo llego a saber no me lavo el cuello en mi vida.
Extracto de una entrevista realizada a Manolo Santiago en el programa "El Llamador" de Canal Sur en Sevilla en Febrero de 1994. Este corte es gentileza de Juan Vicente López Pérez, gran costalero y mejor persona.
Vaya fin de semana que compartimos con Dº Manuel Santiago. Persona irrepetible por su forma de mandar y de tratar a su gente, no habrá nunca nadie con Ël. Otro que venía con él era su inseparable Candi, antiguo costalero de su cuadrilla y por aquel entonces auxiliar suyo.
ResponderEliminarEs curioso como muchos en aquellos años conociamos la semana santa de Sevilla sòlo por las historias que nos contaba Pepe.Aquì en nuestra Semana Santa hablaban de encuentros y hogueras en los rìos mientras un grupo de entusiastas buscàbamos las grabaciones de la banda del Arahal o escuchàbamos las interminables historias de los carvajal, que por cierto no se si le dio tiempo a ver tanto pero el caso es que nosotros nos quedàbamos alucinados escuchàndo.
ResponderEliminarPara aquellos que no pudisteis verlo en vida, os dejo el enlace de un video, donde se refleja como era ese gran capataz.
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=-0iM2_kd5No
Mis recuerdos son pocos de aquel dia.
ResponderEliminarSu llegada al barrio. La cara que puso cuando, al preguntar si esa cuesta la subiamos con los pasos se le dijo que sí, y el respondió algo así como que "luego decimos nosotros de cuestas" (no es literal). La A.M. Jesús Despojado entrando por el barrio tocando y las caras de los vecinos mirando y diciendo que esto que era. Entonces se escuchaba música de Semana Santa solo eso, en Semana Santa. Las conversaciones entre ellos, y nosotros mirando y escuchando sus historias, sus vivencias, sus anecdotas y demás. Recuerdo al costalero que iba con Manolo Santiago. Llevaba toda la vida con él.
Por cierto, a la marcha que compusieron y tocaron ese dia la A.M. Jesús Despojado, le puso letra Antonio Gonzalez. Si no recuerdo mal, esta se escribió en casa de Pepe Carvajal una tarde que el grupo Sueños Rocieros venia de una actuación, y como siempre acababamos en casa de Pepe.
Fdo. LOPEZ.